¿Cometes alguno de estos errores en la gestión de tu almacén? 

Los 4 errores más comunes en la gestión de un almacén

El almacén conforma un centro operacional y estratégico en toda empresa que dedique a la comercialización de mercancía, con el consecuente transporte y almacenamiento. 

Por ello, el almacén conforma un centro neurálgico y una cadena de operaciones de logística, donde la clave para gestionarlo correctamente se basa en la planificación, el análisis y la implementación de nuevas tecnologías. 

Una debida gestión evita muchos errores que pueden conllevar pérdidas de tiempo y dinero. 

¿Quieres conocer cuáles son los errores más comunes y si estás cometiendo alguno de ellos? Hoy en OMS te contamos todo lo que necesitas saber. No te lo pierdas. 

El sistema de gestión de los almacenes 

A la hora de gestionar el funcionamiento de un almacén, no existe una fórmula única para todos, sino que cada uno debe adaptar su propio sistema en base a sus necesidades y objetivos. 

Sin embargo, sí que pueden darse unos errores comunes que dificultan el funcionamiento, sea cual sea la naturaleza del almacén. Son los siguientes. 

Descontrol en la ubicación de los productos 

En cada pedido, la ruta a seguir es nueva para encontrar la ubicación de los productos. No existe un mapa registrado común donde se sitúa cada producto. 

De esta manera, se pierde tiempo a la hora de preparar el pedido, lo que repercute en la productividad total. 

Perder el tiempo por una falta de planificación 

Relacionado con el punto anterior encontramos un error común que es la pérdida de tiempo, no solo a la hora de buscar un producto, también a la hora de realizar le pedido, tener un control sobre el stock…etc.

Son actividades del almacén que si no se planifican o lleva un registro, conlleva a una desorganización que se traduce en una pérdida de tiempo, costes y productividad. Esto tiene un impacto negativo en el flujo tanto económico como de trabajo de la empresa. 

No existe registro del stock 

¿Cuáles son las entradas y salidas?¿Conoces el histórico del almacén?¿Conoces los productos próximos a caducar? Llevar un control sobre tu stock te ayuda a hacer los pedidos correctamente, así como saber cuáles necesitas dar salida primero. 

Si los productos son perecederos, esto es de especial importancia, ya que se trata de vender primero los productos con mayor antigüedad.  

Esta técnica se denomina FIFO ( First-in, First-out) y forma parte de una gestión del almacén optimizada. 

Por otro lado, es necesario conocer el nivel mínimo de productos  y llevar un control para saber cuándo -y cuántos- es necesario adquirir más mercancía y no esperar a que se agoten y así generar retrasos innecesarios.   

Gestión de Incidencias

Pueden ocurrir errores en la gestión del almacén, y es positivo llevar un registro para subsanarlo, aprender y evitarlo en un futuro. 

Y es que una mala gestión se traduce en un cliente tanto como un equipo de trabajo insatisfecho; ya que el trabajo en un almacén no depende de tan solo una persona, siendo un equipo diverso quien entra, sale y manipula el stock. Por lo que el rigor y la planificación es imprescindible. 

Como verás, la gestión del almacén puede conllevar una serie de errores que se pueden subsanar gracias a la planificación previa, lo que permite neutralizar los posibles errores tanto inmediatos como futuros.  

¿Estás cometiendo alguno de estos errores? ¿Cómo crees que lo puedes solventar? 

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